Nusa Lembongan, un paraíso mochilero
Esta pequeña isla de Indonesia está a menos de una hora en ferry desde Bali, y se ha convertido en uno de los reclamos turísticos de la zona, básicamente por la tranquilidad, el surf y el buceo o snorkel, y a precios muy razonables, cosa que atrae a muchos mochileros. Forma parte de un grupo de 3 islas, Nusa Penida la más grande, Nusa Lembongan y Nusa Ceningan la pequeña.
Nosotros llegamos a la isla improvisando nuestra ruta por recomendación de David y Tori, una pareja de amigos con los que estuvimos unos días en Bali. Nada más llegar del ferry ya se percibe la tranquilidad de la isla, prácticamente no se ven coches, solo motos y bicicletas.
Nos alojamos en la zona de Jungut Batu Beach, básicamente es una calle larga medio asfaltada con warungs (pequeños restaurantes locales), alojamientos, centros de buceo y algunas tiendecitas donde venden de todo, hay muy buenas opciones de alojamiento en esta zona de Lembongan. Pronto te sientes como en casa, nosotros al final nos quedamos 6 días, pero nos hubiéramos quedado meses, fue sin duda uno de los sitios que nos atrapó en Indonesia.
Al día siguiente de llegar alquilamos una moto por 50.000 IDR (rupias de indonesia, 3€ aprox.) y recorrimos la isla (tiene una extensión de unos 8km cuadrados), hay muchos sitios para visitar, de hecho un día puede quedarse corto si lo quieres ver casi todo, además que no se puede ir muy rápido ya que las calles suelen estar en mal estado. Nuestra primera parada fue Panorama Point, el punto más alto de la isla desde donde hay unas vistas espectaculares de Jungut Batu, lleno de palmeras y pequeñas construcciones.
Luego fuimos a la zona de Mushroom beach, bastante fea la verdad. Por suerte luego nos dirigimos a Dream beach, esta sí, una playa más espectacular, con el mar con distintos tonos de azul turquesa, aunque el mar estaba tan bravo que era difícil darse un baño tranquilamente. Justo al lado de Dream Beach está Devil's tear, una zona de rocas con bonitas vistas.
Paramos a comer en el sur de la isla, muy cerca del puente que une Nusa Lembongan con Nusa Ceningan (un puente muy estrecho donde cabe una moto y poco más), que cruzaríamos más tarde para recorrer la isla más pequeña de las 3 que forman el distrito de Nusa Penida. Nos encantó todo lo que vimos en Ceningan, fuimos a Secret Beach, a Blue Lagoon y acabamos por casualidad en Twilight, un bar-restaurante con mucho encanto, situado en un acantilado con vistas espectaculares y con piscina y tumbonas. Pasamos un rato de relax increíble.
El día se estaba poniendo feo y asomaba la lluvia, así que decidimos ir volviendo (estábamos lejos de nuestro hostel), paramos en Sunset Point y ahí nos empezó a llover, así que de vuelta tuvimos que parar un rato hasta que a la lluvia nos dejó continuar.
Al volver a nuestro hostal nos llevamos una gran sorpresa, Denís nos estaba esperando, una amiga que conocimos unos años antes en Filipinas y con la que pasamos unos días geniales en Bali y Lembongan.
Al día siguiente nos decidimos a ir a bucear, después de preguntar en diferentes centros de buceo al final nos fuimos a un dive center llevado por indonesios, muy majos, hicimos 2 inmersiones por 700.000 IDR con comida incluida (unos 43€). Vimos coral, anémonas, mantas, una tortuga, nudibranquios e infinidad de peces de colores. Otro día aprovechamos para hacer snorkel para que Tam pudiera disfrutar de la vida marina, y también fue espectacular, definitivamente no te puedes ir de Lembongan sin hacer buceo o snorkel.
Lembongan también puede ser un buen sitio para sacarse el curso de buceo Open Water, hay bastantes centros (algo más caros que en Bali), de hecho Tam hizo el Discover (una especie de bautismo más completo) y le gustó mucho pero al final no hizo el curso por precio.
Otro día alquilamos bicicletas por 20.000 IDR cada uno (algo más de 1€) y nos fuimos a la parte norte de Lembongan, y allí visitamos los manglares con una mujer local que nos dio una vuelta en su barca por 30.000 IDR (menos de 2€), y después nos dimos un homenaje comiendo un Jacket Fish gigantesco en un warung cerca del manglar. Ese mismo día volviendo al hostal nos encontramos una aglomeración de mucha gente, estaba disputándose una pelea de gallos, algo típico de algunas zonas rurales de Indonesia.
Y así, casi sin darnos cuenta, iban pasando los días, entre buena compañía, un sitio tranquilo y acogedor y naturaleza exhuberante. Hasta que decidimos ir hacia Ubud, otro sitio que nos encantó.
Datos útiles
Información y consejos que te ayudarán a planificar tu viaje.
Estuvimos en Lembongan a principios de Marzo de 2015.
En Lembongan viven unas 5.000 personas en unos 8km2.
Tanto en Bali como en Lembongan verás que está lleno de Frangipanis, un árbol con una flor muy característica que huele muy bien (flor blanca con el centro amarillo).
Lembongan vive principalmente del turismo y del cultivo de algas, verás plantaciones enormes en el mar y cómo los locales la secan y la preparan para venderla por una miseria a empresas extranjeras.
Hay bastantes puntos para hacer surf cerca de la costa, aunque la mayoría son para gente con experiencia ya que hay poca profundidad y bastantes rocas o coral.
¿Cómo llegar a Lembongan?
Hay un ferry público que sale desde el final de la calle Jalon Hang Tuah (no tiene pérdida, es al final de la playa de Sanur, pasado el mercado, se venden los tickets en una oficina que hace esquina), hay dos tipos: el rápido o el lento. Os recomiendo el rápido.
De Sanur a Lembongan nos costó 150.000 rupias por persona (unos 9€), hay 2 posibles destinos dentro de Lembongan, yo os recomiendo Jungut Batu. A la vuelta pudimos negociar mejor el precio y nos cobraron 100.000 IDR (unos 6€).
¡Recordad que aquí se negocia todo! Nosotros negociamos alojamiento, la fruta que comprábamos, las motos o bicis que alquilamos, el buceo que hicimos, el tour para hacer snorkel, el ferry para ir/volver a Bali y hasta el pescado fresco que comimos en algún warung.
¿Dónde dormir en Lembongan?
Nos alojamos en Nyoman Guesthouse por 180.000 IDR (unos 11 €), el sitio es genial, hasta hace poco era un simple warung familiar (restarante local) y en un jardín contiguo al warung construyeron 9 bungalows, muy limpios y cuidados, con wifi, además con desayuno incluido (¡ahora tiene piscina también!). Y lo mejor es Ketut, el chico joven que lleva el negocio, siempre está dispuesto a ayudarte con una eterna sonrisa en la cara.
Esta zona de Lembongan nos pareció la mejor para alojarnos, es más tranquila que la zona donde llegan los barcos.
Los precios en Lembongan por lo general son algo más caros que en Bali, pero la diferencia no es sustancial y vale la pena.
Vigila yendo en moto por Lembongan/Ceningan, hay veces que la gente se te acercará y te intentará ayudar y llevarte donde necesites, para luego pedirte dinero. Deja claro desde el principio que no vas a pagar nada, pueden ser muy pesados.
Blue Lagoon en Ceningan, es bonito pero turístico (cobran por "saltar"), además los locales quieren cobrarte al poner una especie de valla, pero puedes ir por otro camino sin tener que pagar (esto de querer cobrarte por acceder a algún espacio natural abierto es bastante común por Indonesia).
¿Dónde comer en Lembongan?
Sitios económicos para comer por la zona de Jungut Batu: Warung Nyoman, Warung Nitya, D and B warung, Warung Nida, Eco Deli (más caro que el resto).
Aunque tiene zonas muy turísticas, Bali sigue siendo un destino ideal para disfrutar de naturaleza exhuberante; playas, volcanes o arrozales, y de sus increíbles templos y su gente amable.